Un grupo de aficionados de la Selección de Inglaterra no pudieron ingresar a ver el primer partido de su selección en Qatar debido a que les prohibieron la entrada al Estadio Internacional de Jalifa porque estaban vestidos como cruzados. Los aficionados se disfrazaron como St George, uno de los santos patrones de la iglesia cristiana, y que se caracteriza por tener un escudo con una bandera inglesa pintada junto con un león. Sin embargo, la seguridad del estadio les impidió entrar a ver el partido vestidos de esa manera. Situación que lamentaron después del juego, cuando tuvieron la oportunidad de hablar con una televisora inglesa llamada Talk TV.
Aficionados con estos disfraces suelen aparecer en cada Copa del Mundo. Sin embargo, en este caso en particular puede resultar un poco fuera de lugar por la historia de la región. Cabe recordar que las Cruzadas tuvieron lugar entre 1095 y 1291 cuando los ejércitos cristianos lucharon contra los musulmanes para quitar Jerusalén del control.
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